sábado, 5 de noviembre de 2011

...

La oscuridad hizo que los sueños se prolongaran interminablemente,
gateamos mi alma y yo hasta el ventanal intentando abrir la ventana,
el cerrojo estaba oxidado y mi débil fuerza hizo que nos hiriéramos las manos.


Ya de espaldas una fuerza comenzó a salir de mi pecho
era alucinantemente dolorosa
todo a mi alrededor se empapó en un dos por tres
observamos recuerdos
momentos presentes que se nos mostraban como en una bola de cristal


Aparecieron ropas extravagentes, zapatos de revistas, lugares exclusivos,
voces falsas, tragos carisimos, pasajes privados y sobretodo cuerpos sin alma
Vomité kilos de palabras y miradas
cerré los ojos
cuando ya no había nada más sentí como alguien abrió la puerta
y nos recogió.


El delirio me trajo la paz,
busqué una goma para borrar la vida del papel
agarré litros de agua para desintoxicarnos
rompí los espejos que me amarraban a la vanidad
destruí palabras y las reconstruí en otras
hasta que desaparecí..
apareciendo en otro lugar con una sonrisa totalmente genuina. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario